¿Conoces la maderoterapia?

Las piezas de maderoterapia son accesorios de madera, lijados y barnizados, que nos ayudan mucho en las sesiones de masaje.

Que puede ser relajante o modelador. Y así traer grandes resultados.

Sin embargo, vienen en pares y tienen forma anatómica para adaptarse al contorno del cuerpo.

Por lo que se pueden utilizar en sesiones de masajes modeladores, ayudando mucho en la remodelación corporal.

Sí, las piezas de madera se adaptan bien a las regiones más propensas a la grasa localizada y la celulitis.

Cómo: Piernas, muslos, caderas, abdomen, flancos, glúteos y brazos.

En primer lugar, se puede realizar el masaje, asociado al masaje manual, con técnicas de masaje sueco.

Si aún no conoces técnicas de masaje, lee el artículo sobre: ¨Las cinco principales técnicas para realizar un masaje modelador y relajante¨

Así que puedes empezar con la técnica de deslizamiento superficial y profundo.

Posteriormente, realizar las demás técnicas necesarias, como amasar o frotar.

Y luego haz el masaje con las pantalas. O simplemente puedes usarlos también.

Por ello, el masaje de maderoterapia se debe realizar con cremas o aceites que ayuden a su deslizamiento.

Preferiblemente cremas que contengan activos lipolíticos. Como cafeína, centella asiática, hiedra y otros.

Beneficios del masaje de maderoterapia:
Aumento de la circulación sanguínea.
Vasodilatación.
Aumento de la hiperemia local.
Mejora de la absorción de los principios activos.
Disminuye la apariencia de piel de naranja de la celulitis.
Modelado corporal.
El masaje con estos accesorios aporta un enorme bienestar.

Porque también se puede utilizar en masajes relajantes, favoreciendo así:

Relajación muscular.
Nodos de tensión decreciente.
Mejorando así el estrés.
Indicaciones y contraindicaciones del masaje.
Tenemos que ser conscientes de las contraindicaciones, que deben observarse en cada sesión de masaje:

Lesiones en la piel.
Presión arterial. sin control.
Fiebre alta.
Trombosis.
Insuficiencia renal y cardíaca.
Fracturas expuestas.
Las piezas de madera son muy fáciles de usar. Solo debemos ser conscientes de la intensidad de la presión ejercida, evitando así posibles hematomas.

La maderoterapia, que es una técnica de masaje corporal que utiliza instrumentos de madera, no debería causar dolor significativo, aunque puede generar una sensación subjetiva de presión o incomodidad, especialmente si se realiza con una técnica más intensa. La idea detrás de esta práctica es estimular la circulación sanguínea, eliminar toxinas y reducir la celulitis, entre otros beneficios.

Es normal en ciertos tipos de masajes el sentir una leve molestia o tensión durante el tratamiento, especialmente si se están tratando áreas con más contracturas musculares o por acumulación de líquido o grasa. Sin embargo, el dolor excesivo no debería ser nunca parte del proceso. Si experimentas dolor intenso, es recomendable comunicarlo al terapeuta para que ajuste la presión o la técnica utilizada.

Cada persona tiene un umbral de tolerancia diferente, por lo que lo importante es que el tratamiento sea cómodo y no cause sufrimiento, ni daños.

¿Debe dejar hematomas la maderoterapia?

La maderoterapia no debería dejar hematomas si se realiza correctamente, pero en algunos casos, puede ocurrir. Esto generalmente sucede cuando se aplica demasiada presión sobre ciertas áreas del cuerpo, especialmente si hay una acumulación de tensión muscular o si la piel es más sensible. Sin embargo, los hematomas no son un efecto esperado, ni buscado, ni común de la maderoterapia cuando se realiza bien y se tiene en cuenta las indicaciones y contraindicaciones.

Si se experimentan hematomas, podría ser un signo de que la presión aplicada fue excesiva o de que la técnica utilizada no fue adecuada para tu tipo de piel o condición física. Las personas con piel más sensible o con problemas de circulación pueden ser más propensas a desarrollar hematomas.

Es importante que el terapeuta ajuste la presión de acuerdo con la tolerancia del paciente y que, si se producen hematomas, se informe para evitar que se repitan en futuras sesiones. Si los hematomas persisten o son muy dolorosos, es recomendable consultar con un profesional para asegurarse de que no haya problemas subyacentes.